Manducare: partiendo desde lo sencillo y lo cotidiano, lo que tenemos más cerca, nuestros productos; mediterráneos en definitiva...para conseguir un resultado que se traduce en un despliegue de sabores, sensaciones... El punto de encuentro en Málaga para los amantes de la buena mesa y la cultura gastronómica.
Toques actuales y desenfadados alumbran la decoración:
Una de las primeras sensaciones que llaman la atención es su tentadora barra que está delimitada con el comedor por un asombroso botellero. En el interior destaca la madera, la claridad de sus paredes, y el fino zócalo de piedra cerámica que rodea su perímetro.
Levantados a las puertas del Puerto Marítimo de Málaga, una de las zonas de negocios y oficinas con más afluencia.
Para comidas de negocios o reuniones contamos con un coqueto reservado, con capacidad hasta 12 personas máximo.
Toques actuales y desenfadados alumbran la decoración:
Una de las primeras sensaciones que llaman la atención es su tentadora barra que está delimitada con el comedor por un asombroso botellero. En el interior destaca la madera, la claridad de sus paredes, y el fino zócalo de piedra cerámica que rodea su perímetro.
Levantados a las puertas del Puerto Marítimo de Málaga, una de las zonas de negocios y oficinas con más afluencia.
Para comidas de negocios o reuniones contamos con un coqueto reservado, con capacidad hasta 12 personas máximo.
Nuestra Cocina:
En los fogones de Manducare se elabora una cocina mediterranea con toques sencillos y muy cuidados, dandole a la vez un toque personal a traves de algunas licencias en forma de Salsas, Combinaciones Originales (Tataki de Solomillo con Waonesa) y clásicos en plena forma (Steak Tartare).
La frescura por encima de todo:
Los productos son además de gran calidad y se procuran de la compra diaria de mercado. La carta es elaborada y algunas de las suculencias son el Rape con Pesto y Arroz Salvaje o las Carrilladas de Ibérico Glaseadas.
Importante es dejar hueco para el postre. La maestría repostera despunta muy alto.
